La diputada morenista Hilda Brown, representante electoral por Baja California, se vio envuelta en un escándalo político cuando se dio a conocer que su cuenta bancaria había sido congelada por solicitud del Departamento del Tesoro. Según la legisladora federal, esta medida es resultado de una «infamia» destinada a desacreditarla y atentar contra su integridad política.
La diputada Brown negó vehementemente cualquier vínculo con La Mayiza, una facción criminal del Cártel de Sinaloa que había sido designada como terrorista por los Estados Unidos. Aseguró que su compromiso inquebrable es con el movimiento político y social que representa, y que cualquier acusación que se le haga sobre estar involucrada con organizaciones criminales es una «calumnia» destinada a desacreditarla.
La diputada Brown recordó que su trabajo como legisladora ha sido siempre enfocado en la defensa de los derechos humanos y la lucha contra la corrupción. «Mi compromiso siempre ha sido con el movimiento, no con intereses personales o políticos», insistió. Aseguró que su dedicación a la causa política y social ha generado resistencia y oposición en ciertos sectores, lo que puede haber llevado a esta campaña de desacreditación.
La noticia del congelamiento de la cuenta bancaria de Brown generó preocupación entre sus partidarios y simpatizantes, quienes la consideran una figura importante en la lucha política y social en Baja California. La diputada ha sido conocida por su valentía y compromiso con la justicia social, y su negativa a ser intimidada por las amenazas o los ataques personales.
La designación de La Mayiza como organización terrorista por parte de EE.UU. puede haber generado preocupación y miedo en ciertos sectores políticos y sociales, lo que podría explicar la medida tomada contra Brown. Sin embargo, la diputada negó cualquier vínculo con esta facción criminal, y aseguró que su compromiso es con el pueblo y no con organizaciones criminales.
La situación plantea preguntas sobre la intención detrás del congelamiento de la cuenta bancaria de Brown. ¿Se trata de una medida destinada a desacreditarla y atentar contra su integridad política, como asegura? O ¿hay evidencia concreta que vincula a la diputada con La Mayiza o otras organizaciones criminales?
La respuesta a estas preguntas puede tener importantes implicaciones políticas y sociales en Baja California y más allá. Mientras tanto, la diputada Brown se mantiene firme en su negativa a reconocer cualquier vínculo con organizaciones criminales, y asegura que su compromiso es con el pueblo y no con intereses personales o políticos.