El piloto de Mercedes probó la intensidad de lo picante del alimento
Lewis Hamilton formó parte de un curioso reto, medir la intensidad de picor de unas ‘alitas de pollo’, lo que puso en duda su régimen alimenticio del veganismo.
El piloto de Mercedes asistió al programa de First We Feast, ‘Hot Ones’, donde fue cuestionado de la intensidad de las supuestas alitas, donde incluso por momentos, no pudo hablar y algunas hasta le sacaron una lágrima.
Aunque no se especificó, el reto se entiende que se hizo con alitas veganas, es decir, sin carne de pollo; recordando que Lewis Hamilton es muy estricto en su alimentación.
Lewis Hamilton se une al veganismo
Fue hace unos años que el siete veces campeón de la Fórmula 1 reconoció que se unió al veganismo, un régimen que quita todos los alimentos de origen animal que de alguna forma fueron explotados o fueron víctimas de crueldad.
Ante ello, Lewis Hamilton reconoció que poco a poco fue quitando la carne roja, luego el pollo y después el pescado, hasta que “estuve listo para comprometerme por completo con el veganismo”, contó.
La eliminación de carne y productos lácteos de su dieta ha tenido un impacto positivo en su salud, tal y como relató el piloto británico: “Pensar que la carne es la única fuente de proteínas es absurdo”, afirma.
“Y, de hecho, al utilizar las de origen vegetal, puedo entrenar igual de duro y hacer tantas repeticiones, si no más, además de afrontar las competencias con un estado mental mejor”, insistió.
¿Por qué Hamilton es vegano?
Por otra parte, el heptacampeón de F1 señaló cómo se introdujo en el veganismo, donde antes de hacerlo, investigó a profundo el tema.
“Crecí como todo el mundo, pensando que los lácteos y la carne eran buenos para la salud. Pensaba que llevaba una vida sana, en definitiva, que me comportaba bien”.
Fue cuando se adentró en el estilo de vida, el cual le agradó: “Luego conocí a algunas personas que me explicaron lo contrario, así que me informé mejor, leí mucho sobre el tema y me di cuenta de que lo que yo creía sano no lo era en absoluto”.
Concluyendo que “decidí intentar avanzar gradualmente en esa dirección, eliminando poco a poco la carne roja, luego el pollo y después el pescado hasta que estuve listo para comprometerme por completo”.